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Pasajes de Arquitectura y Crítica #83
GALACTIC SUITE
(Spain)

CLOSE ENCOUNTERS OF DIFFERENTS KINDS

Close encounter of the First kind: oyes de alguien que quiere enviar gente al espacio. Close encounter of the Second Kind: encuentras a alguien al que le gustaría estar unos días en el espacio. Close encounter of the Third Kind: encuentras a quien te ayuda a construir un hotel al que el que quiere enviar lleva a los que quieren estar. Después de descubrir las Intenciones humanas de enviar gente corriente al espacio, L’EQUIP Xavier Claramunt se ve Impelido a proponer un hotel espacial: Galactic Suite. En estos momentos se buscan colaboradores y financieros Interesados en sumarse al proyecto.
Pero claro, esto no se nos ha ocurrido mientras nos cepillábamos los dientes. Hace unos meses, portavoces de la NASA hablaron en la Universidad de Florida sobre los objetivos de la agencia en los próximos 40 años de explotación espacial. Uno de los temas más tratados fue el hecho de que el gobierno de los Estados Unidos ha recortado severamente el financiamiento de la NASA y la agencia se está planteando buscar el financiamiento de compañías privadas o grupos de Inversión Interesados en el turismo espacial. Quizá se ha llegado al momento en que para que la gente se convenza de que la Inversión en la carrera espacial vale la pena, no sólo ha de ser capaz de seguir las Instrucciones de su QPS sino que quizá haya que darle la oportunidad de subir ahí arriba. Obviamente no se nos ha ocurrido sólo a nosotros. Desde el 12 de Abril de 1961, cuando Yurl Qagarin protagonizó el primer viaje tripulado al espacio, el número de vuelos de este tipo sólo ha sido de alrededor de 4 al año, la mayoría llevados a cabo por los Estados Unidos y Rusia. En 2004, tres de los cinco viajes programados los realizó la Mojave Aerospace Ventures, con naves construidas por la Scaled Composltes de Burt Rutan (una leyenda del diseño aeronáutico) y financiadas exclusivamente por el empresario espacial Paul Q. Alien (cofundador de Microsoft). El 27 de Septiembre de 2004 el Virgin Qroup de Richard Branson (fundador de compañías aéreas pero también de empresas que producen una sola bebida que sólo se vende en un único país) firmó un contrato con la Mojave Aerospace Ventures de Paul Q. Alien para usar su tecnología para el desarrollo del primer operador turístico espacial del mundo.
A partir de ahí y para pensar y comunicar nuestra propuesta, hicimos un análisis tan sencillo como directo de todo aquello que a primera vista podría suponer Ir a un hotel espacial. Éramos conscientes de que luego tendrían que venir los desarrollos más técnicos y los análisis de viabilidad.
Primero y antes de nada vimos claro que había que llegar ahí arriba, y aquí aprovechábamos la dinámica de los proyectos ya plenamente consolidados para realizar vuelos comerciales al espacio. Sin muchos complejos buscamos quién se había planteado el mismo tema y salió desde Julio Verne, al programa Shuttle de la Nasa y el programa Soyuz de Roscosmos. A ellos les añadimos lo que consideramos las nuevas ¡deas, entre las cuales destacamos tres: el proyecto de ascensor espacial; el SpaceShlp One, primero en repetir un vuelo privado al espacio; y la tecnología de los nanotubos, cuya resistencia permite pensar que proyectos como el del ascensor espacial pueden ser teóricamente posibles.
En segundo lugar nos planteamos la necesidad de la estancia, y desde este estadio empezamos pensando en conceptos generales como en Newton y la gravedad o Arquímedes y su principio. Sin olvidarnos del primer hombre que estuvo dándose una vuelta por ahí: Yurl Qagarln. La nueva idea esta vez es nuestra propuesta: Galactlc Suite, que propone quedarse en el espacio como quien se queda en un hotel. En tercer lugar está la supervivencia. Una vez ahí arriba hay que mantener las constantes vitales y seguir nuestros procesos nsioiogicos. Nuestros referentes vuelven a empezar desde las Imágenes socialmente establecidas, como la Bella Durmiente, o cuestiones de mayor enjundia práctica como la cocina de Ferran Adriá y lo que se da en llamar la gastronomía molecular. Luego también se añadió la vida submarina del Capitán Nemo y toda su propuesta de asentamiento urbano en un mundo sin aire. De aquí también podemos trazar una conexión con nuestro proyecto Sea Suite, que propone un asentamiento humano en el fondo del mar. En cuarto lugar éramos conscientes que habría que volver. Hasta el momento este tema lo hemos tratado más metafóricamente, pensando que en principio todo el mundo quiere volver a ahí de donde viene. Por eso nos fijamos en el hijo pródigo, en el cartero que siempre llama dos veces o, como no, en el Profesor Morlarty, que siempre volvía. De todas maneras hay ya que plantearse la posibilidad de la existencia de Individuos que ya no quieran volver jamás a la Tierra. Luego hay un hecho que los engloba a todos: la financiación. Hay que buscar no sólo colaboradores técnicos sino soporte financiero que sea capaz de mantener el periodo anterior a la explotación comercial. Seguimos buscando, pero sabemos que es posible, de hecho la historia nos muestra el caso de grandes fortunas invertidas en proyectos como mínimo arriesgados.
Desde Howard Hughes, que Invirtió los beneficios de sus empresas en el diseño aeronáutico, Onassls, el armador, y Rockefeller y su Standard 011. Otros medios son Inventarse una nueva moneda que sea aceptada, lo que no es fácil, tener un tío rico o Ir a Las Vegas, muchas veces y todas ellas con mucha, muchísima suerte.